La posibilidad de que el tramo de la SE-30 que discurre entre los barrios de Entreparques y Los Carteros, más conocido como Ronda Urbana Norte, se convierta en un bulevar, seguirá siendo eso, una posibilidad; pero no a medio plazo como prometía en 2014 el entonces portavoz del PSOE en la oposición, Juan Espadas, sino más bien a largo plazo.
Así lo ha apuntado la delegada del Distrito Norte de la ciudad, la socialista Myriam Díaz, durante la presentación del proyecto de “apaciguamiento del tráfico” presentado para esa vía y que será ejecutado en próximos meses con cargo a los fondos europeos Edusi, con un presupuesto de 774.000 euros. “En tanto en cuanto no tengamos una alternativa que sea capaz de dar respuesta a todas las necesidades de tráfico que tiene la ciudad -en clara alusión a la SE-40-, seguiremos trabajando sobre todo en la línea de paliar el ruido”.
Así, la Junta de Gobierno local aprobará esta semana el proyecto de sustitución del actual pavimento de esta carretera por otro “fonoabsobente”, en el tramo comprendido entre las glorietas Berrocal y Olímpica, así como en las dos calles que sirven de vías de servicio, Parque de Doñana y Telegrafistas, y también se adecuará un nuevo cruce para peatones a la altura del tanatorio de la SE-30.
La Delegada de Economía del Ayuntamiento, Carmen Castreño, calcula que los trámites de adjudicación puedan durar dos meses, de manera que a principios de 2019 puedan empezar las obras, que tienen una duración estimada de tres meses.
Paralelamente, la Delegación de Movilidad está trabajando en otro tipo de medidas adicionales como el desvío del tráfico pesado a otras vías. “A largo plazo, cuando exista un canal alternativo, la función que debería desempeñar es de ronda urbana y por tanto, lógicamente, tendría que tener un tratamiento más blando físicamente, con mucha menos velocidad”, dijo el gerente de Urbanismo, Ignacio Pozuelo.
