El Ayuntamiento de Sevilla ha negado que exista una situación de abandono o deterioro de la Plaza Nueva, como ha señalado el grupo del PP, y ha defendido el funcionamiento de los servicios municipales de limpieza, parques y jardines, seguridad o vía pública.
En cuanto a los servicios de limpieza, Lipasam tiene una programación especial para esa zona del conjunto histórico con los trabajos que se vienen realizando desde hace años acordes con el pavimento y con una de las zonas más transitadas de la ciudad, ha reseñado el Consistorio en una nota.
En cuanto a Parques y Jardines, durante los últimos años se ha recuperado "por completo" el arbolado que llevaba años perdido con la plantación, dentro de las campañas que anualmente pone en marcha el Ayuntamiento, de las palmeras que se habían venido perdiendo a lo largo de los últimos años. Esto se complementa con las actuaciones de jardinería habituales y con una planificación específica en cada periodo del año.
Sobre el estado de la vía pública, el gobierno subraya que se realizan intervenciones de conservación "prácticamente todos los años" dadas las necesidades de esta céntrica plaza, y especialmente antes de los periodos en los que se produce un mayor paso de personas, como son la Semana Santa y la Navidad. De hecho, como todos los años, en las próximas semanas está programada una intervención con cargo al contrato de conservación, así como las mejoras en los elementos de mobiliario urbano.
"La presencia de Policía Local y Nacional es permanente en este entorno garantizando la seguridad y una respuesta adecuada a la ciudadanía", apunta el delegado del Distrito Casco Antiguo, Juan Carlos Cabrera, quien ha recordado además que cuando hay personas sin hogar se interviene de acuerdo con los criterios de los Servicios Sociales municipales, siendo de hecho frecuentes las actuaciones de la Umies.
En este sentido, el gobierno ha recordado la importante transformación que se produjo en la Plaza Nueva desde su peatonalización y reurbanización. "Desde entonces, el PP no ha parado de criticar este espacio que recuperó la ciudad porque en realidad su modelo fue siempre el de la Plaza Nueva llena de coches y autobuses, completamente deteriorada", apostilla Juan Carlos Cabrera.