El Ayuntamiento de Sevilla ha reciclado este año 50 toneladas de naranjas amargas para crear biogás, dentro de un programa que ha conseguido energía limpia equivalente a la que consumen 250 viviendas en un día.

Según han informado a Efe fuentes del Ayuntamiento, la cantidad de naranjas recicladas este año dobla la de 2020, dentro de una iniciativa que se encuentra en un programa de inversiones presentado a la Unión Europea para su ampliación.

El proyecto lo desarrolla la empresa pública de agua Emasesa en la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR), de El Copero, donde se está llevando a cabo la experiencia con naranjas retiradas de los árboles en la capital andaluza, cuyo zumo ayuda a elaborar gas y con ello energía eléctrica.

El Ayuntamiento ha concretado que la carga es progresiva para analizar la respuesta del sistema, que aprovecha también los lodos que se generan en la planta para ser energéticamente autosuficiente.

Emasesa cuenta con una red de cuatro estaciones depuradoras de aguas residuales, por las que pasan las de todos los municipios que forman parte de la empresa metropolitana, y para su funcionamiento se requiere un volumen de energía de 13,4 millones de Kwh (el equivalente a 3.325 viviendas al año).

En ese punto, entra con especial importancia esta "experiencia innovadora de economía circular”, que aprovecha un recurso que, en su mayoría, va a vertedero.

Mediante un proceso de "cogeneración", la naranja pasa a ser parte activa de creación de gas natural, que a su vez se convierte en energía eléctrica que alimenta la planta, y todo mediante una materia prima fácil de conseguir, ya que Sevilla es la ciudad europea con más naranjos -se calcula que entre sus calles y parques hay 46.000 unidades-.

Cada año, los naranjos generan entre 45 y 130 kilos de naranjas amargas en función del año y de las lluvias, que no tienen ya una reutilización definida, y solo en 2020, la recogida de naranjas en el viario y grandes parques de la ciudad alcanzó los 1.700.000 kilos sin incluir parques históricos o zonas privadas.