La jueza de Instrucción número 5 de Móstoles investiga a un profesor de Artes de un colegio privado de Boadilla del Monte por presuntamente grabar durante una década a alumnas de 6º de Primaria en su despacho cuando se cambiaban para ir a clase de Educación Física, han informado a Europa Press fuentes jurídicas.
La investigación contra el docente se inició el pasado mes de junio después de que un vecino de Villanueva del Pardillo, donde vive el docente, encontrará por casualidad un dispositivo de almacenamiento digital. Su sorpresa fue cuando descubrió que en su interior se almacenaban imágenes de menores que aparecían en ropa interior.
El dispositivo electrónico se entregó en dependencias de la Guardia Civil, cuyos investigadores se percataron de que en el uniforme de las niñas aparecía el anagrama del colegio Virgen de Europa de Boadilla del Monte, según ha adelantado la 'Cadena Ser'.
El 'modus operandi' del presunto pederasta consistía en convencer a las alumnas de que tenían que cambiarse de ropa en su despacho para ir a clase de Educación Física debido a un problema de temperatura en los vestuarios. Tendría instalados presuntamente dispositivos de grabación en su despacho, según investigadores.
Tras recibir el atestado, la jueza de Móstoles ordenó antes de verano la entrada y registro del despacho del docente en el marco de las diligencias de investigación abiertas por la presunta comisión de un delito de tenencia de pornografía infantil. Las actuaciones no están bajo secreto de sumario, según han indicado a Europa Press las mismas fuentes.
En la entrada y registro, los investigadores incautaron el ordenador del profesor, con numerosos archivos de almacenamiento de imágenes. Se le detuvo el pasado mes de junio por un delito de tenencia y producción de pornografía infantil.
El detenido fue puesto a disposición judicial, saliendo en libertad con medidas cautelares como la obligación de comparecer ante el juzgado y la prohibición de acercarse al centro educativo y a otros centros escolares, entre otras medidas.
En la causa se han personado cerca de una decena de familias de jóvenes perjudicadas y se prevé que se incorporen más al abrir la jueza un periodo de ofrecimiento de acciones.
La investigación de la Guardia Civil sigue abierta al estar visionando los agentes del Grupo de Delitos Informáticos (GDT) la gran cantidad de archivos almacenados en los dispositivos informáticos incautados. Los agentes verificarán si las imágenes se distribuían en redes de pedofilia tanto a nivel nacional como internacional.