Agentes de la Policía Nacional han intervenido 104 kilogramos de "speed" y han desmantelado un completo laboratorio para su procesamiento en una vivienda de Zaragoza, en una operación que se ha saldado con la detención de 24 personas en diferentes localidades de Aragón y Navarra.
Fuentes de la Jefatura Superior de Policía han explicado en una nota que los narcotraficantes introducían la droga desde los Países Bajos.
Además de la red encargada de la importación y adulteración de la sustancia, se han desarticulado otros cuatro grupos satélites, dedicados al tráfico de drogas a menor escala, blanqueo de capitales, extorsión y falsificación de moneda.
En el marco de la operación, se han practicado diecinueve registros en los que se han intervenido distintas sustancias estupefacientes, vehículos, dinero en efectivo y dinero falso, armas de fuego y eléctricas, y elementos para el procesamiento y adulteración de la droga.
La operación se inició en agosto de 2016 cuando se tuvo conocimiento de que dos personas de Carcastillo (Navarra) distribuían sustancias estupefacientes en varios municipios de la Ribera de Navarra con un nivel de actividad superior al simple "menudeo" y que uno de ellos tenía un pequeño laboratorio de corte de drogas de síntesis en su vivienda.
Ambos fueron arrestados cuando acababan de recibir un cargamento de tres kilogramos de "speed" que se disponían a adulterar para su distribución.
Después, la Policía detuvo de tres jóvenes que operaban en las localidades navarras de Beire y Olite y que, además de a la venta de drogas sintéticas, se dedicaban al cultivo de marihuana en cantidades importantes, que servía para financiar la compra de "speed" en Holanda a través de un miembro del grupo afincado en Zaragoza.
En lugar de pagar el alijo en efectivo, los proveedores intercambian el "speed" por marihuana cultivada en España y que exportaban a Países Bajos en vehículos modificados.
Las investigaciones avanzaron en Navarra, donde se detuvo a otras tres personas que, además de adulterar y distribuir "speed", extorsionaban a pequeños traficantes por deudas relacionadas con el narcotráfico.
Los detenidos estaban dirigidos por un individuo ingresado en prisión por otros delitos contra la salud pública.
En los cuatro registros realizados en los domicilios de los arrestados, los agentes se incautaron de armas blancas, dos defensas extensibles, una pistola de descargas eléctricas, un revolver, una pistola semiautomática y cerca de 200 cartuchos de arma corta y arma larga.
Después, tras localizar y detener a tres traficantes en Ejea de los Caballeros (Zaragoza), los investigadores centraron sus pesquisas en Leiza (Navarra) y en Zaragoza capital, concretamente en un hombre con antecedentes por delitos contra la salud pública, que operaba entre Pamplona y Zaragoza y quien estaría gestionando la adquisición de un alijo de droga de síntesis importado de Holanda.
Estaba asociado con otro vecino de Leiza que disponía de la infraestructura necesaria para la financiación y el transporte de la droga hasta España, así como con terceras personas que aseguraban la viabilidad de la operación de narcotráfico hasta su depósito final en Zaragoza.
Finalmente, en esta última etapa de la investigación la Policía detuvo a 11 miembros de la organización en Cuarte de Huerva, Marlofa y Zaragoza (Zaragoza) y en Leiza, y registró siete domicilios y un taller mecánico empleado por tres de los detenidos como tapadera.
Se intervinieron 14.500 euros en moneda falsa procedente del pago de diferentes partidas de droga y 98 kilos de "speed", 82 de ellos en una vivienda de la capital aragonesa donde fue desmantelado un completo laboratorio para la adulteración del estupefaciente.
Según la Policía, la instalación contaba con "una sofisticación y capacidad de procesamiento extraordinariamente alta", ya que disponía de maquinaria industrial, productos químicos en grandes cantidades y material electrónico de laboratorio.
Tenían también numerosos elementos para la protección personal como monos, guantes de nitrilo para protección química y mascarillas.
Además de la droga, los agentes intervinieron diversa documentación, una envasadora industrial de vacío, bolsas de vacío para empaquetado, 25 botes de cafeína, y elementos y componentes químicos para la síntesis y procesamiento del "speed".
La detención de dos de los principales investigados desencadenó la incautación de otros 15 kilos de este estupefaciente, que fueron localizados en un vehículo que contaba con dobles fondos en las puertas laterales para ocultar la droga.
En el marco de la misma operación, agentes de la Policía de Aduanas Francesa detuvieron en un control rutinario en la frontera franco-belga a uno de los miembros del grupo encargado del transporte de droga, a quien le fueron intervenidos tres kilos de cristal y dos de "speed" en el doble fondo de otro vehículo, cuando regresaba desde Holanda.
Los dos principales responsables del alijo de "speed" intervenido blanqueaban el dinero procedente del narcotráfico en obras de arte ubicadas en el extranjero.
De hecho, fueron halladas varias reproducciones y certificados de autenticidad de cuadros de importantes pintores en los registros domiciliaros practicados.