El presidente de la Confederación Empresarial del Comercio Andaluz (CECA), Manuel García-Izquierdo, ha cifrado en 20 millones de euros las pérdidas en el comercio andaluz por ausencia de clientes con motivo de la huelga general del 14 de noviembre, tras lo que ha criticado la existencia de "amenazas" a los comerciantes por parte de "algunos exaltados", por lo que pide a los sindicatos que "los controlen".
En declaraciones a Europa Press, García-Izquierdo considera que la jornada de huelga ha afectado "muy negativamente" al comercio andaluz y ha generado "importantes pérdidas", de forma que "aunque han abierto muchísimos pequeños y medianos comercios y algunas cadenas decidieron no abrir, se constata que el consumidor no estaba por la labor de consumir".
"Esta jornada de huelga se va a notar en las ventas, pues el consumidor no está haciendo sus compras", se lamenta García Izquierdo, quien cifra en 20 millones las pérdidas por falta de clientes, y que supone un "dato significativo".
Asimismo, aunque ha descartado la existencia de incidentes graves, García-Izquierdo sí lamenta que "algunos exaltados, dentro de los piquetes coercitivos, han amenazado y coaccionado a empresarios que tenían sus establecimientos abiertos".
Sobre el seguimiento de la huelga por parte de los comercios, el presidente de la CECA ha recordado que "un porcentaje muy alto del pequeño comercio andaluz es autónomo y abre sus establecimientos, ya que al no ser trabajadores empleados no tienen por qué secundar la huelga, pero eso no ha sido entendido por los piquetes".
De esta forma, algunos comerciantes "han decidido cerrar pero para evitar incidentes con los piquetes, y han cerrado sobre todo en horas punta", tras lo que precisan que "el seguimiento directo de los empleados de esos comercios ha sido muy escaso".
García-Izquierdo ha agradecido el "magnífico" ejercicio y labor de la Policía Nacional "que ha controlado altercados que pudieran registrarse, por lo que expresamos nuestro total agradecimiento a las fuerzas de seguridad del Estado".
Asimismo, ha pedido a los sindicatos convocantes que "sean ellos mismos los que controlen a esos exaltados que van en piquetes", tras lo que ha lamentado incidentes como manipulación o bloqueo de cerraduras de los comercios o gritos de los piquetes "coercitivos no informativos", lo que provoca "un mal rato para el empresario".
La mayoría de incidentes han estado relacionados con la aparición de pegatinas de apoyo a la huelga en escaparates y fachadas de comercios así como por el sellado de cerraduras con silicona. Las más destacables, en este sentido, son las ocurridas en la localidad sevillana de Dos Hermanas y en los cascos históricos de Sevilla y Málaga capital.
No obstante, agrega que los comercios "en su gran mayoría están abiertos y por la tarde más todavía".
"Es incomprensible que, dadas las circunstancias económicas actuales, se promueva una huelga que intente evitar el consumo. En el caso del comercio, esta huelga va a suponer un duro revés a la ya, por sí, debilitada situación en la que se encuentra el sector, ya que las ventas van a ser prácticamente nulas en este día", manifiesta el presidente de la Confederación Empresarial de Comercio de Andalucía, Manuel García-Izquierdo Parralo.
