Los hechos se remontan a las 11.00 horas del día 7 de noviembre del año 2007, cuando el acusado, residente en Algeciras, fue interceptado por agentes que habían establecido un servicio de vigilancia en la barriada Mirasierra, de Las Palomeras, sobre un punto de venta.
En ese momento, el acusado transportaba tres papelinas de heroína, tres de cocaína, una dosis de metadona y una caja, sin abrir, de Tranquimazin.
La abogada de la defensa aportó un informe médico que asegura que el acusado padece una enfermedad psiquiátrica por la que debe tomar cuatro comprimidos diarios de Tranquimazín.
También aportó documentación del Centro Provincial de Drogodependencias que prescribe la metadona a M.D.S., así como acreditación de ser drogodependiente desde hace 20 años y contrato de trabajo.
La letrada pidió la absolución para el acusado.