Un año y casi dos meses después de que la Unión Europea y Marruecos firmaran, en julio de 2013, el nuevo protocolo de pesca, el acuerdo podrá materializarse la semana que viene, una vez que hoy se han ultimado en Rabat (Marruecos) los últimos detalles técnicos que quedaban pendientes.
Con ello parece que, ahora sí, acaba la "pesadilla" en la que se había convertido la puesta en marcha de este acuerdo, según fuentes del sector pesquero andaluz.
Con la resolución de los últimos detalles técnicos que quedaban pendientes en la comisión mixta que se ha reunido en Rabat (Marruecos), los barcos, al menos los que hayan pagado ya su licencia, podrán regresar al caladero marroquí que abandonaron precipitadamente en diciembre de 2011, hace dos años y ocho meses, cuando el Parlamento Europeo votó en contra de su prórroga.
El acuerdo permitirá la vuelta a aguas marroquíes a 126 embarcaciones europeas, de las que casi un centenar son españolas, principalmente de Canarias y Andalucía, donde hay 44 barcos, todos ellos de las localidades gaditanas de Algeciras, Conil de la Frontera y Barbate, que esperan poder retomar la actividad en el caladero vecino.
Tras la ruptura, la UE y Marruecos tardaron un año y siete meses en alcanzar un nuevo acuerdo.
Una vez firmado, en julio de 2013, fue aprobado por la Eurocámara en octubre de ese año y ratificado por el parlamento marroquí en febrero pasado.
Entonces se pensó que la entrada en vigor del acuerdo sería inminente.
Pero faltaba la firma del rey Mohamed VI, que no se materializó hasta que el pasado 14 de julio cuando, en la primera visita a Marruecos de los nuevos Reyes de España, el monarca marroquí hizo público que ya lo había firmado.
El acuerdo había pasado ya todos los trámites, aunque ha tenido que esperar más de un mes a que hoy se reuniera la comisión mixta que ha aclarado algunos detalles técnicos que los armadores querían tener claro antes de pagar sus licencias y hacerse a la mar.
Pese a estas dudas, algunos de ellos ya pagaron sus licencias para empezar a faenar y Marruecos ha aceptado compensarles por este mes y medio en el que no han podido ir a pescar a la espera de que se celebrara la comisión mixta.
El nuevo acuerdo, que afectará a unos 700 tripulantes que trabajarán en las embarcaciones españolas que irán a faenar a Marruecos, de los cuales unos 500 serán de la provincia de Cádiz, ha puesto así a prueba los límites de la famosa paciencia de los pescadores.
De los 700 tripulantes que trabajarán en las embarcaciones españolas que puedan entrar en aguas de Marruecos, unos 500 serán de la provincia deCádiz, más los marroquíes que cada barco tiene que contratar en función del nuevo protocolo.
