Lo conocemos por haber sido patrón de la Cofradía de Pescadores de La Línea. Pero en esta ocasión, Leoncio Fernández no nos habla de pesca ni de los conflictos de los pescadores con Gibraltar. Nos cuenta la indignación que tiene por la subida del 0,25% que el Gobierno Central ha fijado para este año 2017.
"Siempre han subido poco, pero era algo que merecía la pena. Este año, sin embargo, me han subido dos euros y esto es ya el cachondeo padre".
Así de rotundo se manifiesta, al asegurar que su pensión ha pasado de 1.060 a 1.062 euros. "No da ni para un desayuno".
Ante esta situación, ha decidido donar esos dos euros cada mes a una asociación benéfica. Y planea hacerlo a Hogar Betania La Línea. "Al menos, podré ayudar a un poco, porque a mí esos dos euros no me solucionan nada. Y lo cuento, precisamente, para que la gente sepa lo que están haciendo con los pensionistas de este país".
Como él, el resto de jubilados españoles conocieron a finales de diciembre que el Consejo de Ministros había aprobado un Real Decreto para subir las pensiones contributivas y no contributivas un 0,25% a partir del 1 de enero de 2017, el mínimo establecido en la ley. Se trata del cuarto año consecutivo en el que las pensiones subirán un 0,25%, el mínimo legal establecido en la fórmula de revalorización introducida en la última reforma de pensiones, que tiene en cuenta los gastos e ingresos del sistema y establece una subida mínima del 0,25% y un techo máximo del IPC más un 0,50%.
Precisamente esta mañana escuchábamos en un bar a un par de jubilados hablar del tema. Uno de ellos comentaba: "No sé para qué me han mandado tantas cartas, si me han subido solo un euro y pico". A lo que le respondía su interlocutor: "Se gastan más en sellos que lo que nos suben".
