De esta manera, la calle Bailén, paralela a Tetuán será la responsable del tráfico a partir de la próxima semana, cuando comiencen las obras del primer tramo de esta obra de remodelación.
La calle Bailén soportará el tráfico intenso que a diario aguanta Tetuán y también lo hará como la calle vecina, con circulación en doble sentido, donde además no estará permitido el estacionamiento de vehículos.
Para facilitar la adaptación que supondrá esta nueva obra el tramo de Julio Burell desde Tetuán hasta la plaza de San Agustín quedará en un sólo sentido, en dirección a la plaza.