Ya están izadas las banderas que acreditan la calidad de las playas conileñas. La playa de Los Bateles exhibe desde sus galardones en Bandera Azul y Q de Calidad Turística, en las playas de Chorrillo y Fontanilla ondea la Q y también, al igual que los Bateles, la Bandera Azul, y esta última también en la playa de Roche, repitiéndose por tanto los galardones del año pasado, ya que estas playas han conseguido renovarlos,un año más.
A estos galardones hay que sumar en esta convocatoria el otorgado como 'Sendero azul' al sendero de Castilnovo, que transcurre por la playa natural del mismo nombre, y que ha sido merecedor de esta distinción debido a su conservación, y valores naturales y turísticos. Solo cuatro senderos en la provincia merecen este distintivo.
En el acto de izado tuvo lugar al inicio del Paseo Marítimo, a la altura de la pasarela más transitada de la Playa de los Bateles, y a él asistieron miembros de la corporación, empresarios turísticos, representantes de asociaciones y viandantes que se acercaron para poder contemplar el momento de la izada. Los encargados de este izado fueron Pepa Amado, concejala de Turismo y Playas y Juan Manuel Bermúdez, alcalde de Conil.
En este sentido, Amado hizo una relación de servicios y efectivos que permiten disfrutar de las playas con seguridad, y que abarcan desde los dispositivos policiales a sanitarios, accesibilidad, temas de salvamento marítimo entre los que se incluye un dron.
Por su parte, el alcalde apuntó durante la presentación que “más allá del esfuerzo que hay detrás, mucho, por parte del Ayuntamiento, trabajadores municipales y empresariado, para conseguir tener nuestras playas en el óptimo estado para su disfrute, estas banderas representan todo un trabajo que se puede resumir en una palabra: compromiso. El compromiso que tenemos en primer lugar con vecinos y vecinas, para el disfrute de un lugar tan emblemático y respetado como son nuestras playas. Y con los visitantes, ya que no hay duda que son nuestro principal reclamo turístico. Pero también supone un gran compromiso con las playas en si mismas, con el medio ambiente. Son un préstamo que nos hacen las generaciones anteriores, para que dejemos a las que nos siguen en el mismo estado en que nos las encontramos o incluso mejor. No son un objeto a consumir, sino a cuidar y disfrutar" añadiendo que "por eso, junto a los esfuerzos que hacen tanto la Administración pública como el empresariado, debemos y necesitamos sumar el de los propios usuarios. Es triste ver noticias como las que nos llegan de los mares de plástico y las consecuencias para las especies. Hay que disfrutar las playas, pero dejándolas en el mismo estado que nos las encontramos”. Bermúdez se refirió también a la situación vivida por las playas este invierno, con los temporales: “Hay que ser consciente que todo daño que hagamos de forma global al medio ambiente, incluido el calentamiento global, va a afectar a ecosistemas tan delicados como nuestro litoral, y este invierno lo hemos vivido con los efectos de los temporales, de los que hemos podido salir y aquí están nuestras playas, pero indudablemente nos preocupa”.
Por último, el primer edil conileño agradeció “el gran trabajo realizado por trabajadores municipales, limpieza, sanitarios, policía local, protección civil, y empresariado local, no solo el de los chiringuitos, parte fundamental de estas playas y que también tienen certificaciones de Calidad, sino todos aquellos que contribuyen a una adecuada oferta turística que permite que Conil esté inmejorablemente situado.
La Bandera Azul, tal vez el sello más conocido asociado a la calidad de una playa, por estar implantado a nivel internacional, acredita el cumplimiento de algunos estándares como la calidad del agua, arena o la adecuada ordenación ambiental, pero también la accesibilidad a esos espacios para personas con movilidad reducida y la existencia de servicios de limpieza, sanitarios y de salvamento que garanticen la seguridad de los usuarios en las playas. En Europa, detrás del mismo está una asociación sin ánimo de lucro, Asociación de Educación Ambiental y del Consumidor (ADEAC - FEE) cofundadora en 1982 de la Fundación Europea de Educación Ambiental (FEE) junto con otras ONGs de otros países europeos. Esta asociación exige un énfasis específico del gobierno municipal para acondicionar las playas hacia la gestión de un modelo de turismo sostenible, cada vez más exigente.
La “Q”, a su vez, acredita el esfuerzo de mejora continua de servicios, limpieza, accesibilidad, información, socorrismo y gestión ambiental que se ofrece a los usuarios de las mismas. La "Q" se otorga como Marca de Calidad Turística Española, y aporta prestigio, diferenciación, fiabilidad y rigor. Para obtenerla deben superar una serie de pruebas objetivas que garantizan el buen uso del sello. La gestión y concesión de dicha Marcha la realiza el Instituto de Calidad Turística (ICTE), a través del Ministerio de Industria, Turismo y Comercio.
