La Plaza Enrique Bartolomé López-Somoza ha quedado ya abierta a los ciudadanos tras la reurbanización llevada a cabo en la zona dentro del Plan Invierte.
Este espacio público ha sido objeto de una amplia remodelación, para mejorar su aspecto y sus servicios, “con unas obras que ya se hacían necesarias” y con las que se han renovado los pavimentos y las condiciones de la jardinería, a la vez que se ha mejorado la accesibilidad.
“Una actuación que va a redundar positivamente en los usuarios de la plaza y en los vecinos de las viviendas colindantes”, como ha señalado la teniente de alcalde de Mantenimiento Urbano, Carmen Ojeda, que este lunes ha visitado la zona junto a Enrique Bartolomé, uno de los hijos del desaparecido profesor, humanista e investigador, quien ha agradecido enormemente esta actuación de adecentamiento y mejora que se ha llevado a cabo en la plaza que lleva el nombre de su padre.
Las obras han consistido en la demolición de parte de los pavimentos existentes y su sustitución por pavimento de albero, así como la reconstrucción de parte del pavimento deteriorado formando un sendero peatonal que cruza la plaza. Asimismo, se ha reconstruido una de las rampas de acceso y se ha construido una nueva junto a la calle Valdés.
La actuación también ha regularizado la pavimentación de los vados de los pasos de peatones que salen de la plaza. Y en cuanto a instalaciones, se han reparado las existentes y se han colocado canalizaciones y arquetas de alumbrado público para el futuro.
La inversión en estos trabajos ha sido de 34.122 euros.